viernes, 8 de julio de 2011

7º.- POR QUÉ NO ESTOY DE ACUERDO. TRENES Y PUERTOS (año 2010)

 POR QUÉ NO ESTOY DE ACUERDO. TRENES Y PUERTOS


Por coherencia y profesionalidad. Los comandantes de aviación antes de despegar, deben seguir un protocolo de comprobación del funcionamiento de los aparatos de abordo. Si no se hace, no quiere decir que el aparato vaya a estrellarse, es cuestión de precaución. Cuando un particular lleno de ilusión y convencido de un proyecto económico, quiere llevarlo a la práctica, los organismos asesores del Gobierno Vasco, Diputaciones, Cámaras de Comercio, etc, aconsejan cumplimentar un protocolo de seguridad que consiste en confeccionar un Plan de Viabilidad, donde se llega a un análisis de costes, rentabilidad del
proyecto y plan financiero, etc, etc. Su realización no supone que el proyecto va a ser exitoso, es simplemente una garantía y un plan de actuación y control de su implementación. Puede ocurrir que sin realizar el protocolo, el proyecto sea un éxito, pero siempre aconsejan realizarlo. Incluso si una comunidad decide crear un asilo benéfico o un parque de bomberos, debe realizarse el estudio de viabilidad del proyecto, aunque los asilados no deban pagar nada y la máxima rentabilidad de los bomberos sea cuando no tienen que intervenir. La razón de ello es que la comunidad conoce así, no sólo la carga financiera de la inversión inicial sino también las cargas de mantenimiento que debe soportar en años posteriores. España es puntera en la construcción de líneas de tren de alta velocidad y ahora empiezan a aparecer sorprendidas críticas de que hay líneas que no son rentables. No se realizó el protocolo obligado en técnica económica del estudio de viabilidad para saber de las consecuencias, conveniencias y dimensionamiento de su realización, y ahora vienen las sorpresas. Otro proyecto que parece estar ya decidido es el del Puerto Exterior de Pasaia, sin hacer el estudio pertinente. Lo pintoresco es que no se sabe si son uno o dos los proyectos de inversión, esto es, si la Rehabilitación de la Bahía de Pasaia y la Construcción del Puerto Exterior, son uno o dos proyectos diferentes, ya que el o los estudios a realizar, serían totalmente diferentes según los casos. En fin, tanto con los trenes, aeropuertos, museos como con los puertos, las inversiones son de tal potencia, que si no son rentables tienen un fuerte componente inflacionario que lejos de autofinanciarse serán pagados por el contribuyente. No quiere decirse que todos los proyectos deban ser decididos exclusivamente en base a resultados económicos, pero sí conocer el alcance económico de los mismos y desde luego, aprobados en sede parlamentaria o política. El Concierto Económico nos protege de los mil millonarios disparates realizados en Guadalajara, Valencia, Sevilla, Madrid, etc., pero igualmente impide que los disparates que se comentan en Euskadi puedan proyectarse en el resto del Estado obligándonos a asumirlos, y aquí, somos muy pocos habitantes para asumir mil millonarios disparates. Ilusión, deseo y esperanza únicamente, no justifican inversiones económicas y sociales que deben estar basados en proyectos económicos y no en bonitas maquetas de proyecto.



Fernando Merino

18 octubre de 2010

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